Te canto y te celebro,
te celebro y te canto,
y si te canto y te celebro
me celebro y me canto,
porque cada átomo que me pertenece te pertenece;
porque cada átomo que te pertenece me pertenece;
porque tu y yo somos la mima cosa”
porque estamos unidos de la misma forma,
de este modo en que no soy ni eres.
Y pertenecemos al mismo infinito,
somos parte del conjunto
y de repente somos uno,
y nacemos y morimos.
Estamos enredados y mezclados
en el desquiciante juego de un suspiro.
Pero estas conmigo y yo contigo,
navegando el piélago insondable de la vida
y aunque habitamos en dos mundos diferentes
tú estas conmigo y yo contigo.
J. Efren Olvera
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